El viento silba

No sé si rescatarte de las cenizas
y convertir tu memoria en carne
Ya que el viento silba tu nombre
Con reiteración y cada vez más agudo
Me tapo las orejas, sin dejar de observar
la espiral creada por los silbidos
Que me impregnan la retina
Con imágenes
Que no son
Ni eran

Las calles desiertas
Cubiertas por aullidos
Cómo serían
Si fuese yo pronunciando tu nombre
¿Vacías?
¿Silenciosas?
¿Coloridas?
¿Pobladas?
¿Sombrías?
¿Emotivas?
Me quedo en blanco
Y quieta
Envuelta por el vendaval


No sé
Si resucitare de las cenizas
Convertir tu memoria
En carne, sangre y huesos
El viento silba tu nombre
Con reiteración y cada vez más agudo
Me tapo las orejas



Los silbidos disuenan
Anhelo su consonancia.

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